sábado, 31 de marzo de 2012

Testimonio - Noemi Cruz

Cuando yo llegue a la Iglesia Universal en 2006, estaba muy enferma. Poco tiempo de estar en la Iglesia el doctor me dijo que me tenían que operar porque tenía un quister en el ovario. Además de eso me tenía que sacar la matriz con todo. Ese mismo día salí del hospital y fui a la Iglesia. Cuando llegue a la Iglesia me arrodille frente al altar y clame a mí Señor con toda mi fe y mi fuerza. Después, hable con el pastor y le explique todo lo que me estaba sucediendo. El me dijo que nada me iba a pasar porque yo era una mujer de mucha fe.
En el día de la operación, me llamaron del hospital por la mañana diciéndome que el doctor había cancelado la operación, porque la última placa que me tomaron, vieron que el quister había desaparecido. Gracias al Señor Jesús. 


Noemi Cruz

jueves, 16 de febrero de 2012

Miembros del Grupo

Antes de venir a la Iglesia, mi vida era de tristeza, depresión, y hacía cosas que no le agradaban a Dios. Tenía muchos problemas, oía voces y respondía a ellas. Estuve recluida más de 9 años en el hospital siquiátrico y tomaba muchos medicamentos de depresión. Conocí la Iglesia por medio de mi ex-suegra y mi ex-cuñada. Hice las cadenas y mis votos con Dios fielmente. Hoy mi vida esta transformada. Ya no tomo todos aquellos medicamentos que tomaba, no oigo las voces, el Señor me ha contestado muchos pedidos, y deje todo lo que hacía de malo. Soy una nueva persona.

He aprendido a controlar mis impulsos desde que llegue a la Iglesia Universal. Se me comportar mejor, y yo he visto los cambios en mi vida. Soy muy feliz porque tengo Jesús en mí vida y al Espírito Santo que me da consolación cada vez que atravieso por un momento difícil, y estoy muy agradecida.

Desde que estoy en el grupo Caleb, mi forma de ser y mis actitudes han cambiado y también aprendí a compartir con las otras personas. Para mí el grupo Caleb es una otra familia que el Señor me ha dado.

Miriam E. Cadeño

sábado, 11 de febrero de 2012

Los secretos de Jonathan Sperry

En nuestro próximo evento
vamos a ver esta película otra cultura, acerca de Jonathan Sperry. Un anciano que dedicó todo un verano para ayudar alos niños jóvenes a encontrar a Dios y ser mejores personas.

miércoles, 1 de febrero de 2012

Día de Juegos


El día de juegos del Grupo Caleb fue lleno de diversiones.

 
Esta fue una vitoria inesperada. Sra. Noemi gano los 2 regalos.


Descubriendo nuevos talentos
¿Usted cree que la edad es un obstáculo para hacer la diferencia? Bueno, yo te digo que no. Aquí la edad es una ventaja para hacer la diferencia. Mira este vaso de flores hecho con frutas que Dianette hizo.

¿Muy hermoso, verdad?
Si usted también desea hacer parte de este grupo, contáctenos al teléfono: (860) 860-7060.

miércoles, 18 de enero de 2012

Conozca los miembros del Grupo Caleb

  Mi nombre es Beatriz Caldeion Higalg. Tengo 55 años, nascí en Lima – Perú, y estoy en la Iglesia Universal hace 1 año e 8 meses.
Mi vida estaba espiritualmente muy mal. No podía dormir, tenía mucho nervosismo, y mis hijos de tan mal que estaban se refugiaban en el alcohol. Había muchas peleas en mi casa, y a veces yo golpeaba a mis hijos. Cuando empecé a venir en esta Iglesia, mis hijos de despreciaron y me maltrataban. Ellos creían que yo me iba de esta Iglesia, porque yo siempre cambiaba de Iglesia, pues no me sentía bien en las otras Iglesias. Pero desde que encontré a Dios, estoy bien día tras día. Ahora mis hijos me buscan, y tenemos unión. Ya no hay peleas en la casa, hay paz. Ya puedo dormir bien, y sé que en esta Iglesia está Dios. Aquí yo encontré la paz que yo necesitaba. Una paz que lo buscaba en otras congregaciones, pero nunca lo he encontrado, como lo encontré en la Iglesia universal. Estoy muy feliz aquí.

Lección práctica

Había una vez un gran guerrero. Aún siendo muy viejo, todavía era capaz de derrotar a cualquier competidor. Su reputación era conocida en todo el país, y muchos estudiantes se reunían para estudiar bajo su dirección. Un día, un joven guerrero infame llegó a la villa. Él estaba determinado a ser el primer hombre en derrotar al gran maestro. Junto a su fuerza, el maestro poseía una habilidad fantástica en percibir y sacar provecho de cualquier debilidad de su oponente, ofendiéndolo hasta que perdiera la concentración. Entonces, él esperaba que su oponente hiciera el primer movimiento, y al revelar su debilidad, lo atacaba con fuerza sin piedad y con la velocidad de un rayo. Nadie jamás había resistido, más allá del primer movimiento, en un duelo contra él.
Contra todas las advertencias de sus estudiantes preocupados, el viejo maestro alegremente aceptó el desafía del joven guerrero. Cuando los dos se posicionaron para luchar, el joven guerrero comenzó a insultar al viejo maestro. Él le tiraba tierra y escupía su rostro. Durante horas ofendió verbalmente al maestro con todo tipo de insultos y maldiciones conocidos por la humanidad. Pero el viejo guerrero se quedó allí parado, tranquilo. Finalmente, el joven guerrero quedó exhausto. Percibiendo que había sido derrotado, huyó vergonzosamente.
Un tanto decepcionados por no haber visto a su maestro luchar contra el insolente, los estudiantes se acercaron y le preguntaron:
- ¿Cómo pudo soportar tantos insultos y ofensas? ¿Cómo pudo derrotarlo sin moverse?
- Si alguien viene a darle un regalo y usted no lo acepta, ¿para quién regresa ese regalo?, respondió el maestro.
Obispo Macedo