Photo album generated with Smilebox |
Grupo Caleb
¡Su edad no es un límite a la diversión de una manera saludable!
miércoles, 4 de abril de 2012
Grupo Caleb-Día de belleza
sábado, 31 de marzo de 2012
Testimonio - Noemi Cruz
Cuando yo llegue a la Iglesia Universal en 2006, estaba muy enferma. Poco tiempo de estar en la Iglesia el doctor me dijo que me tenían que operar porque tenía un quister en el ovario. Además de eso me tenía que sacar la matriz con todo. Ese mismo día salí del hospital y fui a la Iglesia. Cuando llegue a la Iglesia me arrodille frente al altar y clame a mí Señor con toda mi fe y mi fuerza. Después, hable con el pastor y le explique todo lo que me estaba sucediendo. El me dijo que nada me iba a pasar porque yo era una mujer de mucha fe.
En el día de la operación, me llamaron del hospital por la mañana diciéndome que el doctor había cancelado la operación, porque la última placa que me tomaron, vieron que el quister había desaparecido. Gracias al Señor Jesús.
En el día de la operación, me llamaron del hospital por la mañana diciéndome que el doctor había cancelado la operación, porque la última placa que me tomaron, vieron que el quister había desaparecido. Gracias al Señor Jesús.
Noemi Cruz
Etiquetas:
Conozca los miembros del Grupo Caleb,
Testimonios
jueves, 16 de febrero de 2012
Miembros del Grupo
Antes de venir a la
Iglesia, mi vida era de tristeza, depresión, y hacía cosas que no le agradaban
a Dios. Tenía muchos problemas, oía voces y respondía a ellas. Estuve recluida
más de 9 años en el hospital siquiátrico y tomaba muchos medicamentos de
depresión. Conocí la Iglesia por medio de mi ex-suegra y mi ex-cuñada. Hice las
cadenas y mis votos con Dios fielmente. Hoy mi vida esta transformada. Ya no
tomo todos aquellos medicamentos que tomaba, no oigo las voces, el Señor me ha
contestado muchos pedidos, y deje todo lo que hacía de malo. Soy una nueva
persona.
He
aprendido a controlar mis impulsos desde que llegue a la Iglesia Universal. Se
me comportar mejor, y yo he visto los cambios en mi vida. Soy muy feliz porque
tengo Jesús en mí vida y al Espírito Santo que me da consolación cada vez que atravieso
por un momento difícil, y estoy muy agradecida.
Desde
que estoy en el grupo Caleb, mi forma de ser y mis actitudes han cambiado y
también aprendí a compartir con las otras personas. Para mí el grupo Caleb es
una otra familia que el Señor me ha dado.
Miriam E. Cadeño
Etiquetas:
Conozca los miembros del Grupo Caleb,
Testimonios
sábado, 11 de febrero de 2012
Los secretos de Jonathan Sperry
vamos
a ver esta película otra cultura, acerca de Jonathan Sperry. Un anciano que
dedicó todo un verano para ayudar alos niños jóvenes a encontrar a Dios y ser
mejores personas.
miércoles, 1 de febrero de 2012
Día de Juegos
El día de juegos del
Grupo Caleb fue lleno de diversiones.
Esta fue una vitoria inesperada. Sra. Noemi gano los 2 regalos.
Descubriendo nuevos talentos
¿Usted cree que la edad es un
obstáculo para hacer la diferencia? Bueno, yo te digo que no. Aquí la edad es una ventaja
para hacer la diferencia. Mira este vaso de
flores hecho con frutas que Dianette hizo.
¿Muy
hermoso, verdad?
Si usted también desea hacer parte de este grupo, contáctenos
al teléfono: (860) 860-7060.
miércoles, 18 de enero de 2012
Conozca los miembros del Grupo Caleb
Mi nombre es Beatriz Caldeion Higalg. Tengo 55 años,
nascí en Lima – Perú, y estoy en la Iglesia Universal hace 1 año e 8 meses.
Mi vida estaba espiritualmente muy mal. No podía
dormir, tenía mucho nervosismo, y mis hijos de tan mal que estaban se
refugiaban en el alcohol. Había muchas peleas en mi casa, y a veces yo golpeaba
a mis hijos. Cuando empecé a venir en esta Iglesia, mis hijos de despreciaron y
me maltrataban. Ellos creían que yo me iba de esta Iglesia, porque yo siempre cambiaba
de Iglesia, pues no me sentía bien en las otras Iglesias. Pero desde que
encontré a Dios, estoy bien día tras día. Ahora mis hijos me buscan, y tenemos
unión. Ya no hay peleas en la casa, hay paz. Ya puedo dormir bien, y sé que en
esta Iglesia está Dios. Aquí yo encontré la paz que yo necesitaba. Una paz que
lo buscaba en otras congregaciones, pero nunca lo he encontrado, como lo
encontré en la Iglesia universal. Estoy muy feliz aquí.
Etiquetas:
Conozca los miembros del Grupo Caleb,
Testimonios
Lección práctica
Había una vez un gran
guerrero. Aún siendo muy viejo, todavía era capaz de derrotar a cualquier
competidor. Su reputación era conocida en todo el país, y muchos estudiantes se
reunían para estudiar bajo su dirección. Un día, un joven guerrero infame llegó
a la villa. Él estaba determinado a ser el primer hombre en derrotar al gran
maestro. Junto a su fuerza, el maestro poseía una habilidad fantástica en
percibir y sacar provecho de cualquier debilidad de su oponente, ofendiéndolo
hasta que perdiera la concentración. Entonces, él esperaba que su oponente
hiciera el primer movimiento, y al revelar su debilidad, lo atacaba con fuerza
sin piedad y con la velocidad de un rayo. Nadie jamás había resistido, más allá
del primer movimiento, en un duelo contra él.
Contra todas las
advertencias de sus estudiantes preocupados, el viejo maestro alegremente
aceptó el desafía del joven guerrero. Cuando los dos se posicionaron para
luchar, el joven guerrero comenzó a insultar al viejo maestro. Él le tiraba
tierra y escupía su rostro. Durante horas ofendió verbalmente al maestro con
todo tipo de insultos y maldiciones conocidos por la humanidad. Pero
el viejo guerrero se quedó allí parado, tranquilo. Finalmente, el joven
guerrero quedó exhausto. Percibiendo que había sido derrotado, huyó
vergonzosamente.
Un tanto decepcionados por no haber visto a su
maestro luchar contra el insolente, los estudiantes se acercaron y le
preguntaron:
- ¿Cómo pudo soportar tantos insultos y ofensas?
¿Cómo pudo derrotarlo sin moverse?
- Si alguien viene a darle un regalo y usted no lo
acepta, ¿para quién regresa ese regalo?, respondió el maestro.
Obispo Macedo
Suscribirse a:
Entradas (Atom)